En mi opinión, el último reto de acoso británico. ¿Por qué? Porque se hace literalmente cuesta arriba desde el principio. Además del desafío físico, que no debe ser subestimado, esta experiencia lleva al deportista al límite, desafiando toda nuestra gama de habilidades de caza que hemos heredado y aprendido a través de dos millones de años de evolución.

Personalmente, prefiero cazar ciervas (hembras) en lugar de un ciervo solitario debido al desafío adicional. A las hembras les gusta reunirse en grupos. Intentar acercarse lo suficiente a una manada de ciervos cuando hay más de cuatrocientos ojos y oídos en busca de peligro, y sin nada evidente tras lo que esconderse aparte de tu astucia y un grupo de brezos, eleva considerablemente el nivel. A medida que aumenta el desafío, también lo hace la emoción del día, que perdura en las historias que se cuentan y repiten entre los amigos. Puede que yo prefiera cazar ciervas, pero, por supuesto, un hermoso ciervo escocés debería formar parte del currículum de todo deportista serio.

El acecho se realiza a pie con un acechador profesional. En años anteriores existía la posibilidad de que los menos ágiles subieran en taxi la mayor parte de la colina en determinadas zonas, pero hoy en día hay que estar preparado para caminar desde el principio. Empiezo a prepararme con meses de antelación a la temporada con el entrenamiento físico y parece que es cada vez más difícil cuanto más viejo me hago. Sin embargo, al igual que ocurre con el esquí, para disfrutar de él hay que tomarse en serio el reto físico y prepararse para ello. Hay que estar preparado para caminar hasta 15 km al día subiendo y bajando por terrenos montañosos y llevando el equipo personal. Sin embargo, al final del día, no hay nada mejor que revivir la aventura remojando los músculos cansados en un baño caliente con un buen whisky en la mano, seguido de una abundante y deliciosa cena con amigos y familiares en el albergue.

Lo ideal es que un rececho te lleve a 100 metros de distancia del premio, sin embargo y sobre todo en las ciervas prepárate para hacer tiros más lejanos. Mi consejo es que practiques en casa en el campo de tiro y te sientas seguro de dar en el blanco a 200 metros con consistencia. Además, si tiene uno, traiga el telémetro. En las colinas de Escocia, es increíblemente fácil perder el sentido de la distancia y usar los ojos sólo requiere algo de práctica. También es muy importante vestirse para la ocasión. Como éste es un tema en sí mismo, he dedicado otro artículo a tratarlo. Consulte mi "sección de ropa y equipamiento".

Calibre del rifle: mínimo el .243 con una bala de 80 grains o más. Después del 243, todo se reduce a la preferencia personal y muchos utilizan el 308 y el 30.06. Personalmente, disparo un 30.06 con una bala de 150 grains (Winchester 150g ballistic silver tip.) y esto ha funcionado una y otra vez. Por supuesto, siempre se puede utilizar un arma de la finca adecuado para el propósito si no desea utilizar su propio equipo.